Dia 3 - Líneas de Nazca

Hoy hemos madrugado mucho, estábamos de camino a las 6:30 para coger un autobús de linea a las 7 de la mañana.
Ahora estoy en el autobús por la Panamericana con destino a Paracas donde nos espera nuestro conductor o guía local que será el que nos lleve al aeropuerto y nos muestre lo que haya que ver por la zona.
El autobús la verdad que está muy bien, es muy cómodo y amplio, el equivalente a la clase bussines de un avión.
Paracas e Ica están como a unos 300 Kms de Lima, también al lado de la costa, por tanto tenemos la costa a la derecha y a la izquierda unas inmensas dunas salpicadas en algunas ocasiones por zonas mas o menos verdes con palmeras y otro tipo de árboles.
Hemos llegado bastante bien a Paracas, aunque nos querían llevar a Ica, pues teníamos billete para Ica, menos mal que nos había avisado nuestro conductor de Lima (Eric) de que debíamos bajar en Paracas, y por suerte ahí nos estaba esperando el nuevo conductor.
El nuevo conductor nos ha llevado directamente al aeropuerto de Paracas para hacer la visita de las líneas de Nazaca. La corta conversación que hemos mantenido con este conductor ha sido muy instructiva, pues nos ha contado nuevas teorías sobre las líneas de Nazca. Parece ser que la teoría más actual y más creíble sobre las líneas de Nazca, es que las crearon los habitantes de Nazca 700 años a.c. cuando vieron que sus campos se estaban secando debido a las sequías continuas. Estos indios veneraban a un Dios con forma de tigre alado y pensaban que dibujando estas líneas en el suelo, con forma de animales y plantas, este Dios las vería y volvería a provocar lluvias para esa zona. Esta teoría se ve respaldada por el hecho de que se han encontrado raíces en medio del desierto de Nazca, lo que indica que en la antigüedad fue una tierra húmeda.

El vuelo ha sido de lo más movidito, el piloto para conseguir que viéramos bien las líneas los que estabamos sentados a la derecha de la avioneta, como los que estaban a la izquierda, daba un montón de bandazos y vueltas que nos han puesto a casi todos el estómago boca arriba.
"Cury Cure, debajo del ala, el loro o papagayo, debajo de ala", eso era lo que decía el copiloto. "Cury Cure" debe ser algo en chino o japones, pues llevábamos a dos orientales en el avión y debía ser para ellos.
Después del vuelo, el conductor nos ha traído al hotel Double Tree Hilton Paracas donde hemos comido y hemos podido disfrutar de un bonito paseo por la playa.
Da la casualidad que este hotel tiene acceso a una de las bahías de la Península de Paracas y linda con la Reserva Nacional de Paracas, esto nos ha permitido ver en un corto paseo una importante variedad de aves, como flamencos, chorlo ártico, gaviota gris, etc.